Facebook vive uno de los peores momentos de su existencia con una polémica tras otra y su CEO señalado y acusado. Los jóvenes pasan de la red social, que pierde credibilidad.

Si ánimo de ofender al mundo de la literatura, a Facebook se le está poniendo cara de tapa de libro viejo, haciendo una analogía con la traducción de su nombre. Pero no uno de esos libros épicos como puede ser “El Señor de los anillos”, no. Cara de obra clásica del romanticismo infumable.

En el año 2004 nació la red social más importante del mundo, mucho antes de que las redes sociales fueran algo para nosotros. Su nacimiento y su historia está contada incluso en una película. En los últimos 10 años se ha convertido en una de las principales plataformas de internet con millones de usuarios conectados a cada segundo del día.

En España comenzó a arrasar entre 2008 y 2009. Todos los que llegamos al mundo de las redes sociales con Tuenti, nos pasamos a Facebook tiempo después.

Sin embargo, la breve historia de las redes sociales y de Internet, nos ha enseñado que todo acaba cayendo. Pasada de moda, sustituida por otras redes sociales más jóvenes o simplemente dejada de lado por el estancamiento de las redes sociales, Facebook muestra visos de estar de capa caída.

No tenemos más que entrar en nuestro time-line en el móvil y el ordenador y comprobar que la red social se esfuerza por ofrecernos contenido sugerido de páginas a las que ni si uiera seguimos o publicaciones de hace días.

La búsqueda de la viralidad, el control contínuo con un algoritmo que selecciona lo que vemos a cada momento han hecho de la red social una de las plataformas menos usadas por las nuevas generaciones. Cada vez hay más personas que reconocen no estar usando Facebook desde hace mucho tiempo.

Una imagen muy dañada

La red social y la empresa de Mark Zuckerberg se veían en el punto de mira de la prensa la pasada semana, cuando sufrieron una caída de más de 6 horas de todos sus servicios. Instagram y Whatsapp, propiedad de Facebook desde hace años sufrían la misma caída.

Algo que no le ha venido nada bien a su creador, que se vé nuevamente comprometido y señalado por las malas prácticas continuadas en la empresa, que han sido destapadas por una antigua trabajadora creando una nueva polémica para Facebook.

Y es que, entre otras muchas cosas, se ha demostrado gracias a informes internos de la propia red social, que conocen y explotan la adicción que generan Facebook o Instagram y que su algoritmo le da especial viralidad al contenido negativo porque genera mucha mayor actividad. Por ejemplo Instagram, según estos informes de la propia empresa ahora publicados, genera problemas de autoestima a las jóvenes que lo usan.

Otro de los datos negativos contra Facebook descubiertos en las últimas semanas es la existencia de una lista de personas que generaban contenido engañoso, pero a los que no se limitaba a pesar de saberlo.

Los escándalos no han parado de producirse en los últimos años, acorralando cada vez más su CEO, y poco a poco muchos personajes públicos han dejado de lado la red social.

“O estás en Facebook o no estás”

La monserga que se viene repitiendo en los últimos años de cara a las empresas; “O estás en Facebook o no estás” parece no calar tanto en los propios usuarios, que van dejando la red social en favor de nuevas plataformas que ocupan nuestro tiempo, como pueden ser Instagram (todo queda en casa) o Netflix y TikTok.

Los videos más virales, los contenidos más interesantes, ya no nacen en Facebook, que ha pasado a ser una plataforma con una media de edad bastante más alta que hace unos años. Y es que, el hecho de que nuestros padres o familiares puedan estar en Facebook y ver lo que publicamos, nos ha llevado a buscar nuevas apps en las que conectar con la gente que nos mola.

Según un informe reciente publicado en The Guardian, un número cada vez más alto de adolescentes y jóvenes pasan de usar Facebook. Muchos afirman que no suben contenido y que solo la abren para “ver los cumpleaños de otras personas”.

Sin embargo, en España el imperio de Zuckerberg se mantiene fuerte ya que Whatsapp es la aplicación de mensajería más usada e Instagram una de las redes sociales más activas actualmente.

Nuestra experiencia en Facebook

Después de varios años creando una comunidad bastante interesante en nuestra página de Facebook con un programa de radio, de pronto nos vimos obligados por la red social a pagar para que nuestro contenido llegara a nuestros seguidores.

Al principio no era mucho, cuando la red social inventó su modelo de publicaciones pagadas, era bastante económico para medios y pequeñas empresas. Pero con el tiempo, el alcance pagado se fue encareciendo y el alcance orgánico llegó a cero en nuestra página.

Ahora verás que nuestra presencia en redes y principalmente en Facebook es testimonial. Aún así, encontramos la forma de tener visitantes cada día en nuestro sitio web.

¿Morirá Facebook en los próximos años?

La estrategia de copiar o plagiar las funciones de otras apps que no ha podido comprar le ha funcionado a medias al bueno de Mark. Por ejemplo, el invento de los “Stories” en Instagram funcionaron bastante bien, dando un buen palo a Snapchat, aunque ciertamente los filtros de la red social del fantasma siempre han sido insuperables. Eso sí, el intento de integración de estos en Whatsapp o Facebook ha resultado un fiasco y los usuarios lo han rechazado por completo.

Tampoco le ha funcionado del todo bien su “Reels” copiando el tipo de contenido de TikTok. En este caso no han logrado llevarse a los grandes creadores de contenido a su terreno.

Parece que, mientras Instagram sigue teniendo bastante tirón entre los jóvenes, Facebook pierde usuarios activos a un ritmo alarmante. Todo, a pesar de llevar años intentando integrar otras funciones y usos en la red social.

Podríamos ver la muerte del gigante en los próximos años o quizás al menos un abandono al nivel de MySpace, Google+ o Tuenti.

Lo cierto es que llevamos unos años usando las redes sociales y sus perjuicios para nuestra salud comienzan a visibilizarse en una sociedad que poco a poco aprende a usarlas de una forma más responsable. Esta concienciación hace que Facebook sea cada vez menos valorada después de conocer muchas de sus cuestionables técnicas para hacer dinero. La polémica filtración de documentos internos de Facebook por parte de una ex-trabajadora ha vuelto a meter en problemas a su creador. De momento, desde la red social lo desmienten todo.

Mi recomendación, si queréis saber más sobre este tema, es que veáis el documental imprescindible de Netflix sobre este tema: “El dilema de las redes”.